Por mucho que a todos nos encantaría tener una casa enorme, espaciosa, con ventanas gigantes y un jardín infinito, la verdad es que la realidad es muy distinta. Especialmente en las ciudades, donde el espacio es más valioso que el oro. Pero sólo porque tu casa o departamento sea más chico de lo que te gustaría, eso no significa que debas resignarte a sentir claustrofobia cada vez que cruzas la puerta. Si sabes cómo hacerlo, la decoración de tu hogar puede hacer que te sientas a gusto y hasta a que se vea más grande de lo que en realidad es. Y las flores son una de las mejores herramientas para lograrlo.

Las plantas y flores nos conectan con la naturaleza, incluso aunque se trate simplemente de una pequeña maceta o de un jarrón con flores cortadas. Esto significa que, si sabes cómo utilizarlas, incluir flores en tu decoración te dará una sensación de frescura y te hará pensar en espacios naturales y abiertos. Con un par de toques florales, hasta la habitación más pequeña se sentirá espaciosa. Además, las flores nos hacen sentir relajados y a gusto, por lo que son excelentes para contrarrestar el agobio de los ambientes cerrados.

El truco está en no sobrecargar el espacio. No importa lo bonitos que sean, intenta no escoger arreglos florales que sean muy grandes, ya sea de altura o de ancho. Además, los arreglos con demasiado follaje parecerán más grandes de lo que son y dominarán el espacio en el que se encuentren, haciéndote sentir como si la habitación fuera más chica. El color que elijas también es importante, ya que distintas tonalidades pueden engañar el ojo de distintas maneras. Los colores oscuros achicarán el espacio, al igual que los tonos demasiado brillantes.

Por otra parte, los colores suaves, en especial pasteles y blancos, reflejan más la luz, por lo que dan la ilusión de un ambiente mucho más espacioso. Para maximizar este efecto, siempre es mejor que la habitación esté bien iluminada, con cortinas abiertas de colores claros, y espejos en lugares estratégicos para reflejar más la luz.

Por último, siempre es importante recordar que la calidad siempre va a ser mejor que la cantidad. No es necesario que cubras cada superficie libre de tu casa con un arreglo floral. Simplemente escoge un lugar en el que no haya demasiados muebles o decoraciones y ubica un sencillo arreglo que combine con la decoración general. Evita ubicar arreglos en estanterías donde ya haya varios adornos, ya que esto se verá sobrecargado y achicará el espacio.

Como te habrás dado cuenta, con un poco de creatividad, podrás lograr que cualquier espacio sea acogedor y se sienta mucho más espacioso de lo que en realidad es. Ahora ya sabes cómo decorar espacios reducidos. ¡Aplícalo!