A los amantes de las flores, nos encanta tenerlas por toda la casa. Eso no excluye la estancia en la playa y en el campo, donde tenemos mayor oportunidad de relajarnos y apreciarlas con detenimiento. Sin embargo, nos encontramos con la incógnita ¿Qué flores son las más adecuadas para decorar en verano? Hoy te respondemos esta pregunta y te dejamos tips para el cuidado de tus flores en verano.
Hay algunas variedades de flores que suelen ser más resistentes a temperaturas cálidas, lo que las convierte en la mejor opción al momento de buscar flores para obsequiar a alguien especial ya sean amigos, familiares o comprarlas para nuestra casa.
De acuerdo con su morfología, entre las las flores de corte más resistentes encontramos a las rosas, los girasoles y las gerberas.
Las Rosas (Rosa spp.): Las rosas son una clásica y hermosa variedad de flores que es preferida por muchas personas, no solo debido a su belleza y a la gran variedad disponible, sino también por sus particularidades.
Las rosas poseen la capacidad de realizar adaptaciones fisiológicas y morfológicas para adaptarse a climas fríos y cálidos, lo que hace de ella una la flor ideal para decorar espacios en cualquier momento del año incluyendo el verano. Algunas de ellas son:
Regulación de la transpiración: Las rosas poseen unas pequeñas aperturas en sus hojas llamadas estomas. En épocas de mucho calor las estomas se cierran parcialmente para impedir la pérdida de agua por evaporación.
Cutícula cerosa: Esta es una fina capa que recubre los tallos y las hojas de las rosas, creando una barrera impermeable que ayuda a reducir la evaporación del agua y protege a la planta de la temperatura extrema.
Adaptaciones en la fotosíntesis: La evolución de las variedades de rosas en su proceso de fotosíntesis le han conferido eficiencia en condiciones como altas temperaturas o luz intensa, haciéndolas más adaptables a esas condiciones.
Estrategia de sombreado: Algunas variedades de rosas han desarrollado estrategias para reducir el stress lo que incluye el crecimiento de hojas más grandes en las partes más sensibles de la planta.
Resistencia al estrés oxidativo: A través de un sistema antioxidante las rosas protegen a sus células de los daños causados por radicales libres, los cuales se producen en mayor cantidad en condiciones de estrés ambiental.
Girasoles (Helianthus annuus): Son las flores del verano por excelencia. El girasol es una planta capaz de transpirar abundantemente en situaciones de disponibilidad hídrica. Sin embargo, posee también mecanismos de adaptación a déficit hídrico de corto y largo plazo. Esto lo logra a través del cierre parcial de sus estomas afectando a la transpiración en mayor proporción que a la fotosíntesis.
Heliotropismo: A través del heliotropismo, el girasol se mueve siguiendo la dirección de los rayos del sol. Esta acción minimiza la exposición de las hojas a la luz directa de los rayos solares, contribuyendo a una menor pérdida de agua.
Fotosíntesis C4: Este tipo de fotosíntesis mejora la eficiencia de la planta al capturar dióxido de carbono, lo que le permite prosperar en condiciones de alta luminosidad y altas temperaturas. (Aguirrezábal, 2001)
Gerberas (Gerbera): Al género gerbera pertenecen más de 50 especies, la mayoría de origen africano. Las especies Gerbera Hamesonii y Gerbera viridifolia, son las principales variedades cultivadas como flores de corte.
Este género fue descubierto y estudiado en el siglo XVIII por el naturalista holandés Grenovius pero el nombre de estas flores se le atribuye a los hermanos Gerber, ilustres botánicos alemanes quienes estudiaron a profundidad la flora del Sur del África.
Tolerancia a la luz intensa: las gerberas suelen prosperar en lugares que tienen niveles muy altos de luz. (Jiménez, 2020)
Cuidados especiales de las flores cortadas: Las flores cortadas que usamos para hacer ramos y arreglo florares requieren de cuidados especiales para una mayor vida en florero. A continuación, te compartimos los tips para que puedas disfrutar de tus flores por más tiempo en casa:
Cambiar el agua de manera diaria en verano: El agua tiene nutrientes que las flores deben aprovechar, además de permitir que se encuentren perfectamente hidratadas, cuyo resultado se verá en cómo se encuentren los pétalos, hojas y tallos. Es por eso que en verano, debemos retirar el agua, lavar el florero y volver a llenarlo con agua limpia. No debemos olvidar verificar que todos los tallos se encuentren sumergidos en el agua.
Cortar los tallos en cada cambio de agua: No solo basta con cambiar el agua todos los días, sino también con cortar los tallos de forma diagonal o biselado. La recomendación es que solo se corten un par de centímetros, que será lo suficiente para permitir la absorción de nutrientes propios del agua. Este proceso debe repetirse en cada cambio de agua. Recordemos que en verano, el agua deberá cambiarse todos los días,
Limpieza: Alguno de los pétalos y hojas de las flores se pueden caer después de algunos días en el jarrón, pueden parecer inofensivos en el agua de nuestras flores, aunque no lo es y puede evitar que nuestro arreglo floral se vea estéticamente correcto. Lo ideal será retirar todo aquello que pueda perjudicar a nuestras flores, ya que contaminan el agua, trayendo como consecuencia que las mismas se marchiten antes de tiempo.
Usar preservante floral: Ayudará a brindar más nutrientes a nuestras flores. La manera correcta de usarlo es disolviendo su contenido en un florero con agua y dejando que haga efecto. Este paso deberá llevarse a cabo en cada cambio de agua, junto con la limpieza correspondiente del jarrón y los residuos de las flores.
Este verano disfruta de la alegría que te brindan las flores mientras decoras tu hogar usando rosas, girasoles y gerberas y recuerda los cuidados que desde Kukyflor te sugerimos para prolongar la vida de tus flores al momento de decorar tu hogar.
