10 formas diferentes para decorar tu boda con flores
Nuestra boda es nuestro día. Punto. Se hace como queremos. Con lo que queremos. Y, generalmente –por no decir siempre–, queremos flores. Muchas flores. Abundantes flores. Aquí te mostramos diez formas diferentes para decorar tu casa con flores:
Pétalos sobre el jardín
Sí, se ve bonito tener al sobrino o la ahijada caminando con pasos chiquitos llevando su canastita de paja echando los pétalos de rosas por donde pasa… pero nada como esta impresionante alfombra de pétalos que hará lucir la pasarela tu ceremonia como una verdadera obra de arte.
Claro, los invitados podrán preguntarse en la recepción en qué mesa se sentarán. Pero de lo que no debe quedarles duda es cuál será tu mesa. Este cortinado hará que de todas formas tus invitados sepan que esa mesa lleva tu nombre y el de tu pareja.
Cásate bajo un techo de flores
Ok, seguramente la idea de tu matrimonio al aire libre te ha perseguido desde que tienes 15 años (o menos…), pero luego de ver este techo de flores rodeando esa hermosa araña de luces, no vas a querer ver el sol (o la noche) hasta que acabe la ceremonia, la fiesta y la resaca.
Quizás exageramos con lo de “jardín”, pero nada te impide colocar algo más deslumbrante que un simple y aburrido centro de mesa. Entonces, ¿Por qué no instalar un soporte para colocar un esplendoroso arreglo de flores desbordantes multicolor? Mira qué diferencia.
¡Olvídate de los centros de mesa!
Sí, pues. Dejemos de lado este tipo de atavío, y decoremos las mesas con flores que rebosan hasta el suelo.
Una cortina de claveles es perfecta para recibir a la familia y amigos que se darán cita a tu boda para compartir este día especial.
¡El bouquet! ¡No te olvides del bouquet!
Imperdible. Lleva uno que sea, en efecto, inolvidable. Como esta belleza. Y la corona, ¡mira esa corona, por Dios…!
Torta de muchos pisos y flores
Porque necesitas una torta. Y necesitas flores. Y necesitas una torta con varios pisos y muchas flores. Es decir, rosas. Necesitas una torta con varios pisos y muchas rosas. Eso.
Vas a querer casarte de nuevo para poder entrar cargada en un anda decorada con hermosas y rosadas peonias. ¿Para qué caminar no más hasta el altar?