Cuidar el medio ambiente es muy importante para todos, sin importar nuestra edad, clase social o nacionalidad. Todos vivimos en el mismo mundo y mantenerlo limpio y en buen estado es responsabilidad de todos. Como todas las cosas, el amor por la naturaleza también se aprende, por lo que enseñar a los niños a respetar y cuidar el mundo a su alrededor es responsabilidad de los padres. Una excelente manera de lograr que los niños se sientan conectados a la naturaleza es a través de las plantas.

A los niños de todas las edades les gusta hacer cosas con sus propias manos, por lo que enseñarles a cuidar de sus propias plantas los hará sentir orgullosos de su trabajo, e interesados en la naturaleza. Hacer el clásico experimento de germinación de frijoles es una opción válida, pero muchos niños se aburrirán fácilmente. Para captar su atención ¿por qué no buscar plantas y flores coloridas e interesantes? Mientras los niños ayudan a cuidar de las flores de la casa, es una excelente oportunidad para explicarles por qué necesitan agua y luz del sol, pero que deben tener cuidado de no ahogarlas.

Si tienes un jardín o espacio para un cantero, permitirle a tus hijos que planten semillas en la tierra puede ser mucho más interesante para ellos que un frasco de vidrio con frijoles. Además, durante la primavera, los niños podrán ver de primera mano cómo las mariposas, las abejas y los otros insectos necesitan a las flores y viceversa. Este es un buen momento para enseñarles lo importante que es cuidar el medio ambiente y el gran daño que causan las conductas egoístas que contaminan el planeta.

Además de enseñar a los niños los cuidados que las plantas necesitan, también es una buena idea charlar con ellos sobre todas las cosas que nos proporcionan. Por ejemplo, puedes mostrarles a tus hijos cómo los colores y aromas de las flores las convierten en excelentes regalos para distintas ocasiones. Pero eso no es todo lo que las plantas hacen por nosotros. Los árboles nos dan madera, las frutas y vegetales nos dan alimento, y utilizamos flores para hacer de todo, desde colorantes y pinturas hasta perfumes. Lo que es más, todas las plantas nos dan oxígeno y aire limpio, incluso las pequeñas plantas en las macetas de la casa.

Hacer que los niños amen las plantas y se preocupen por su cuidado los hará sentirse más en contacto con el medio ambiente y crecerán para convertirse en adultos ecológicamente conscientes.